Salone del Gusto y Terra Madre Unidos: ¡Un éxito!

La edición de 2012 del Salone del Gusto y Terra Madre ha llegado hoy a su fin dejando a los organizadores, productores, delegados y campesinos un renovado sentimiento de esperanza y entusiasmo por el futuro de la alimentación y de la agricultura. Esta nueva fórmula organizativa, al celebrar Terra Madre, el encuentro mundial de las comunidades del alimento, junto al Salone del Gusto, ha supuesto un éxito: la asistencia total ha experimentado un aumento del 10% de visitantes, al pasar de los 200.000 en 2010 a 220.000 en 2012 a lo largo de cinco días. Es asimismo digna de destacar una mayor prolongación de las visitas en comparación con años anteriores. Los visitantes han llegado más temprano, y la mayor parte de ellos permanecía el día entero en la Lingotto Fiere.

Los organizadores consideran el acontecimiento como un rotundo éxito y una señal de que, no obstante la crisis económica, el público ha comprendido la importancia política del evento, el papel central de la alimentación y la agricultura, así como la necesidad de un cambio de paradigma en el sistema alimentario. Más de 16.000 personas, tanto de delegados de Terra Madre como del público en general, han tomado parte en 56 conferencias organizadas por Slow Food. En salas abarrotadas, asistieron a debates sobre temas que iban desde la salud y el etiquetado de los alimentos hasta el agua y otros asuntos sociales, con paneles compuestos por productores de alimentos, expertos, comunidades del alimento representativas y jóvenes de todo el mundo. Es de esperar que esta expresión de interés público fuerce a la industria a mirar a los campesinos con una mayor atención y consideración ética.

En el centro de estas conferencias, y del acontecimiento en general, se hallaban los jóvenes, fueran campesinos, activistas o estudiantes. Las creativas actividades organizadas por los estudiantes de la Universidad de Ciencias Gastronómicas y la “Slow Food Youth Network” consiguieron involucrar a jóvenes de todo el mundo en debates sobre la producción y el consumo sostenibles.

Un papel central en el Salone del Gusto y Terra Madre cumplieron asimismo las actividades educativas para niños: 3.700 de ellos tomaron parte en juegos centrados en la educación para la comida y para el gusto, en comparación con los 1.000 participantes en 2010. Visitaron asimismo el evento estudiantes de 6.000 escuelas de toda Italia. Las clases de Master of Food, talleres para adultos, fueron igualmente exitosas, con los billetes agotados antes del comienzo del evento, hasta el punto de forzar a los organizadores a añadir más talleres en el programa. Una alta proporción de billetes, 60%, fue vendida a visitantes de fuera de Italia.

Los productores de Baluartes Slow Food, comunidades del alimento de Terra Madre y expositores presentes en los mercados italiano e internacional expresan además su satisfacción por la excelente interacción con los visitantes, que mostraron más curiosidad que nunca por conocer los productos, y el magnífico nivel de ventas: alrededor de una mitad de los productos de Baluartes se había agotado al final del cuarto día. Otra excelente señal ha sido el alto número de compradores que han visitado el evento: 350 en el curso de los cinco días.

Los visitantes se mostraron muy receptivos respecto de las iniciativas sostenibles tomadas por Slow Food para el evento, y apreciaron el hecho de que el programa impreso haya sido sustituido por la aplicación especial desarrollada para “Smartphone”. Además de haber ganado un premio a los mejores servicios app en Milán, fue descargada por 15.000 usuarios, que dieron una respuesta muy positiva. 

Si bien es la primera vez que el Salone del Gusto y Terra Madre se celebran de forma conjunta, también este ha sido un año especial al haber coincidido en el mismo fin de semana 650 delegados de 95 países para participar en el Congreso Internacional de Slow Food. Un evento clave de tres días que va a definir el futuro de la organización, con presentaciones destacadas de 90 delegados de 51 diferentes países, compartiendo sus propias experiencias Slow Food.