Educación
La educación, como la alimentación, es un derecho universal, y la base para repensar nuestros sistemas alimentarios.
Todos tenemos derecho al placer a través de la comida. Pero sólo comprendiendo de dónde proceden nuestros alimentos -cómo han sido producidos y por quién- podremos aprender a combinar nuestro placer con un sentido de la responsabilidad.
Slow Food entiende el valor cultural y social de la comida, y nuestra convicción de que la comida combina placer, cultura y convivencia es lo que hace único nuestro enfoque de la educación alimentaria.
-
Nuestros objetivos
Desarrollar materiales de comunicación y lanzar campañas para aumentar la concienciación sobre el sistema alimentario y cambiar comportamientos.
Diseñar e impartir actividades educativas y de formación, así como experiencias para mejorar los conocimientos sobre la alimentación -desde la producción al consumo, pasando por la pérdida de alimentos- y repercutir en las prácticas y elecciones de las personas.
Diseñar e impartir actividades educativas y de formación para profesionales del sector alimentario con el fin de recompensar a quienes realicen cambios positivos en la producción, distribución, comercialización, consumo y gestión de residuos de alimentos.
-
Qué hacemos
Huertos Slow Food
Desde hace más de 30 años Slow Food siembra huertos escolares en todo el mundo como aulas al aire libre, promoviendo el aprendizaje de las variedades vegetales, ofreciendo escenarios para el florecimiento de la biodiversidad y facilitando el intercambio.
Centros educativos Slow Food
Slow Food ha creado centros regionales de formación para públicos destinatarios internos y externos a la red Slow Food (líderes y educadores Slow Food, estudiantes, profesores, consumidores, profesionales de la alimentación y empresas privadas). Basándose en la metodología de nuestro Manifiesto de la Educación, facilitan el intercambio horizontal de conocimientos (de agricultor a agricultor, de consumidor a productor, etc.) y prevén colaboraciones con escuelas y organizaciones locales que trabajan en educación alimentaria/agroecología/problemas sociales.
Saber más
Intercambios y formación para profesionales y educadores de la alimentación
Slow Food organiza una amplia gama de intercambios y programas de formación, que incluyen catas guiadas, seminarios en línea, talleres prácticos y comidas con los productores.
-
Qué puede hacer usted
Más información como consumidor
Nuestras decisiones determinan cómo se cultivan y producen los alimentos y repercuten directamente en las comunidades de todo el mundo. Slow Food anima a todos a reflexionar más sobre cómo nuestras elecciones alimentarias dan forma al mundo que nos rodea y proporciona herramientas para ayudar a elegir alimentos que sean buenos para quienes los comen, buenos para quienes los cultivan y buenos para el planeta. Hay muchas medidas sencillas que puede tomar para convertirse en un consumidor más responsable y beneficiar al mundo que le rodea.
Descargar el kit de herramientas regeneraction
Manténgase informado como educador
¿Está interesado en introducir actividades de Slow Food en su escuela o institución? Inscríbase en la comunidad mundial de educadores de Slow Food para recibir material relevante y actualizaciones sobre los proyectos de Slow Food.
Únase a la Comunidad Mundial de Cocineros Slow Food
Slow Food reúne a cocineros que comparten el compromiso de proteger la biodiversidad agrícola y salvaguardar los conocimientos alimentarios y las culturas locales. Como profesionales de la alimentación en la intersección entre alimentación, cultura y clima, ustedes tienen el poder de impulsar el cambio en nuestros sistemas alimentarios. Al abrazar la diversidad y preservar las culturas y los conocimientos en los productos alimentarios con los que trabaja, inspira a otros a abrazar los alimentos buenos, limpios y justos.
-
Iniciativas de la Red
Nuestra red lleva a cabo actividades educativas en distintos contextos: Comunidades y Convivia de todo el mundo organizan Talleres del Gusto, actividades de educación sensorial y encuentros con productores. He aquí algunos ejemplos.
Aprendizaje Slow Food en Carintia, Austria
El aprendizaje de Slow Food Travel en el Biohotel Der Daberer, en Carintia (Austria), de clima neutro, asocia a los productores locales con la red de Slow Food Travel e infunde los valores de Slow Food en las prácticas de sus aprendices, sensibilizando sobre los productos alimentarios locales y enseñando valiosos conocimientos sobre la producción, la transformación y el comercio de alimentos. Los cocineros de Slow Food Carintia han introducido también los Rincones Slow Food en muchas escuelas locales, involucrando a miles de estudiantes en actividades de jornada completa que alimentan su curiosidad por la comida tanto dentro como fuera de las aulas.
Incorporación de los huertos escolares al plan de estudios nacional, Macedonia
Nuestra sección macedonia, Slow Food Bitola, ha diseñado el nuevo y apasionante curso «Los huertos como herramienta educativa», que está pendiente de aprobación por parte de la Oficina de Desarrollo Educativo. Una vez aprobado, todas las escuelas de Macedonia tendrán libertad para incorporar este curso al plan de estudios, educando a los alumnos de cuarto y quinto curso sobre biodiversidad, crecimiento y desarrollo de las plantas, labranza, siembra, fertilización y fotosíntesis.
Follow Slow Food Bitola
Plantación de centros forestales comunitarios en Rumanía
La Comunidad Slow Food de Târgu Mureș, en Rumanía, ha transformado un espacio abandonado en PermaFLORA: un centro forestal comunitario diseñado para promover la filosofía de Slow Food a través de una serie de actividades educativas, recreativas y regenerativas. Este espacio polivalente alberga un jardín forestal comestible perenne y un huerto, una biblioteca de semillas, colmenas y un observatorio ornitológico, y sirve de escenario para los campamentos de verano de Slow Food y otros proyectos escolares locales.
Más información sobre el proyecto
Actividades escolares de Slow Food en España
El Convivium Slow Food del Garraf i Penedès lidera un proyecto educativo polifacético para fomentar el aprendizaje alimentario y medioambiental y promover un cambio positivo en el estilo de vida. El proyecto reúne a muchos miembros de la comunidad, incluidos productores locales, familias y cocineros de comedor, para educar a los escolares a través de la educación sensorial y del gusto. Estos niños aprenden también los temas de Slow Food: sostenibilidad, biodiversidad, salvaguardia de la cocina y la cultura locales y lucha contra el desperdicio alimentario. Junto con el proyecto se creó un kit didáctico llamado La Escarola Perruqueta va a la Escuela, que permite reproducirlo en otros lugares.
Siga el convivium slow food del garraf I penedès
Actividades escolares de Slow Food en Suiza
El Slow Mobil es un remolque de construcción convertido en cocina equipada que viaja por todo el país involucrando a los niños en una forma experimental de aprendizaje. Esta iniciativa enseña a los niños temas ecológicos y relacionados con la alimentación mediante divertidas clases prácticas de cocina con alimentos sanos y sostenibles. Cuando termina la jornada escolar, el Slow Mobil se transforma en una sede móvil para eventos relacionados con la alimentación sostenible, haciendo partícipes a los adultos del mensaje de Slow Food.
Saber más
Modernizar los menús de los comedores escolares checos
«Está en nuestro plato y nos importa» es un proyecto en curso organizado por Slow Food Praga que aborda la urgente necesidad de promover una nutrición sostenible para niños y jóvenes. Casi el 80 % de los escolares checos almuerzan a diario en los comedores escolares, lo que los convierte en escenarios perfectos para la educación alimentaria y nutricional. Pero la modernización de los menús escolares no ha ido a la par de nuestros conocimientos nutricionales. Este proyecto pretende remediar esta situación con deliciosos alimentos sanos, protegiendo la salud de los niños y nutriéndolos de conocimientos.
Comunidad Educativa Equilibrium en La Habana, Cuba
Equilibrium es una comunidad de profesionales multisectoriales con experiencia que se centra en el asesoramiento y la formación en alimentación y nutrición. Su programa, Con las manos en la masa, utiliza la metodología de Slow Food para enseñar a los niños sobre alimentación y nutrición, sumergiéndoles en el mundo de la cocina y dejándoles disfrutar de sus sentidos. Cada día, los alumnos preparan una receta saludable y experimentan el placer de comerla mientras aprenden el camino que ha seguido un ingrediente desde la granja hasta el tenedor. Equilibrium también trabaja con personas mayores, organizando charlas sobre los beneficios de una alimentación sana y facilitando el intercambio de conocimientos, consejos, habilidades y recetas.
Saber más