Slow Food KM0 Argentina: la sinergia entre productores cocineros y consumidores

El programa km0 tiene inicio en agosto del año 2022 ante un llamado del Ministerio de Turismo de Salta a la Red de Organizaciones Slow Food  de Argentina para trabajar juntos en el fortalecimiento de la gastronomía local, las producciones agroecológicas y el comercio de cercanía teniendo especial cuidado con  la logística siendo respetuosos del ambiente.

Rocío Urzagasti Wilde @rociouwilde

En agosto 2022 hicimos la presentación en Salta a través del Ministerio de Turismo de Slow food Internacional  de su historia, filosofía y de sus acciones en el mundo, del programa Km0 con la presencia de más de 250 personas de la Cámara Hotelera Gastronómica y de la prensa local.

Luego de meses de intenso trabajo hoy contamos con la adhesión de 80 productores entre ellos una cooperativa de mujeres por la soberanía alimentaria,30 restaurantes que involucran 130 personas entre cocineros y personal de sala.

Llegó  el momento de otorgar las primeras distinciones a las actividades que se destacan por difundir el alimento bueno limpio y justo. Fueron 13 en esta oportunidad las distinciones en la localidad del Carril con Mi dulce tentación, La Estancia, Papabuelo, El portal de los Valles, Emy, Pizzería Doña Lia y Sabores nobles.

En nuestro recorrido llegamos a Campo Quijano donde nos encontramos con Mabel y Esteban miembros de una comunidad originaria donde sus ancestros se remontan al periodo pre incaico. Dicha comunidad está compuesta por doce familias que producen en forma comunitaria que intercambian en una economía circular con otros productores de la zona , del maíz capia a deleitarnos con exquisitas Habas preparadas por Mabel para recibirnos y disfrutar de lo imponente de sus montañas con fantásticas tonalidades. Proseguimos hasta Chocoana dónde se ubica Finca Cielo Verde es Carla quien nos recibe gestora de la actividad junto a su esposo, una mujer que atravesó las dificultades del 2001 en Argentina poniendo energía  entusiasmo y determinación; son muestra de ello su huerta sus vites, la reserva natural y sus riquísimos platos que recrean   la tradición local; nos despedimos de ella para proseguir a Vaqueros dónde el cielo se nos abrió de par en par;  vino al encuentro Olga quien lleva adelante un servicio educativo la escuelita agroecológica donde niños a partir de los dos años hasta jóvenes de veinticinco aprenden a cuidar las semillas a  hacer plantines, sobre cabras, elaboración de  quesos genuinos; allí se cultiva trigo orgánico.También  se encuentra el baluarte de El Yaconla tarea que lleva adelante Olga de hace más de veinte años; nos llena de esperanza que  una educación sustentable con  respeto a la tierra, a sus bosques y a la biodiversidad sea posible.

Rocío Urzagasti Wilde @rociouwilde

Y luego de esta travesía nos vamos acercando a Salta Capital nos encontramos con Ana una joven emprendedora; su actividad  es Arumi  . Ana atravesó la emergencia sanitaria que la obligo a cerrar sus puertas para re comenzar con fuerza y tenacidad, recorrimos su huerta, nos contó  de sus talleres donde cocina junto a sus comensales y probamos exquisitos jugos con frutos de su producción.

El camino continua hasta el centro histórico esta   vez  visitamos  los  Patios de San Francisco un establecimiento situado en el patio de la Iglesia de San Francisco que data del siglo XVIII con una torre campanil de 54mts de altura considerada la más alta de Sud América; el 14 de julio de 1941 fue declarada monumento histórico nacional.

Y como siempre que visitamos Salta el cierre es en Alegría; fue Claudio del emprendimiento cuatro salames con quien conversamos sobre la feria que se estaba organizando con  70 emprendedores de la cultura salteña y siguiendo el camino Slow Food nos deleitamos degustando sus productos.

Nuestro viaje va llegando a su fin y es difícil poner en palabras el agradecimiento a Rebeca Arancibia nuestra anfitriona desde el Ministerio de Turismo a la fotógrafa @RociouWilde al chofer que con su inmensa paciencia nos acompaño en este viaje.

Podemos dar fe que de Salta una se enamora…