Las Mujeres de Chiapas Protectoras de La Milpa 

Las mujeres de Chiapas han preservado por centenarios el conocimiento ancestral de La Milpa, un valioso pilar de la agricultura que ha proveído a la comunidad con soberanía alimentaria y cultural. 

El Baluarte de La Milpa celebra su invaluable contribución a esta tradición que ha fomentado la preservación de semillas, la salud de los suelos, y el bienestar del medio ambiente como fundación para su comunidad.  

Tuvimos el placer de entrevistar a Yolotzin Bravo, coordinadora local del Baluarte de la milpa en Chiapas sobre el impacto del proyecto en la soberanía alimentaria de las mujeres que protegen este valioso recurso ancestral. 

¿Cuál es la situación agrícola en el área del proyecto? 

Los altos de Chiapas se caracteriza por ser agricultura de autoconsumo, sin embargo actualmente la dependencia a agrotóxicos sigue presente, incluso agrotóxicos que están prohibidos en otros países, pero que en México y Chiapas empobrecen los campos día con día.

¿Cuál ha sido el impacto del proyecto en la comunidad?

La colaboración de Slow Food ha reforzado la conformación formal de la cooperativa de tostaderas artesanales Tostixim renovando los procesos frente a la secretaría de Hacienda.

Un aporte significativo para esta cooperativa ha sido por un lado el desarrollo de la marca, etiqueta y empaque, así como ampliar los espacios de venta, aliándonos con restaurantes que comparten nuestra filosofía.

La colaboración no sólo ha impulsado la cooperativa desde la comercialización, también sabemos que es un pilar fundamental para construir vidas digna. Junto con las organizaciones locales CAMMADS y CLAN Sur que acompañan la cooperativa y el Banco de Semillas, también se ha buscado fortalecer a las compañeras como sujetas de su transformación, en talleres en los que reconocieron la importancia de sus aportes, por ejemplo en el trabajo de la milpa, espacios donde suelen ser visibilizadas. 

En este sentido, este proyecto impulsó la construcción de dos casas como espacios para las mujeres que trabajan el maíz y las semillas. Estos espacios son muy importantes para impulsar los procesos colectivos y de fortalecimiento para ellas, pues en muchos espacios de Chiapas las mujeres no tienen derecho a la tierra y las decisiones importantes suelen tomarlas hombres. Por ello estos espacios reivindican su trabajo e importancia como guardianas de semillas y sabores que conservan la identidad de sus regiones.

Image credit Gabriela Sanabria

¿Cómo ha apoyado a las mujeres este proyecto? 

Les ha ayudado a tener más autonomía, respeto, y dignidad por su trabajo. 

Durante el proceso de sembrar los cimientos del Baluarte las mujeres que forman parte de la cooperativa Tostixim, además de formar parte de formaciones, participaron en diferentes eventos y programas de radio. Este proceso ha fortalecido sus habilidades personales e identidad, han sido panelistas en Foros como el del Máiz que impulsa UNICACH y Congresos internacionales como el de Agroecología en ECOSUR, con ello ahora están seguras de que su palabra y su trabajo son esenciales. Este proyecto ha apostado también por el fortalecimiento de las jóvenes como actoras principales, actualmente ellas empiezan a ser las portavoces del proyecto.

Image credit Gabriela Sanabria

A parte de las tostadas, ¿qué otros productos venden? 

Además de las Tostadas, las mujeres hacen diversos alimentos del máiz, principalmente pozol  blanco o con cacao (bebida hecha de maíz, que varía según la región), además de chalupas, memelas y tortillas, atoles (derivados del maíz que se mezclan con frijol u otras plantas). Las hierbitas de la milpa las usan principalmente para consumo personal

¿Dónde venden los productos? 

Los principales puntos de distribución antes del proyecto eran espacios individuales en los mercados locales y el mercado agroecológico de San Cristóbal. Actualmente han incrementado sus ventas mediante pedidos a algunos restaurantes en la república y Tuxtla Gutiérrez, así como en algunos otros tianguis alternativos y redes de economía solidaria.

¿Cuáles son los planes futuros para la comunidad? 

Creo que un eje clave es seguir fortaleciendo las capacidades de las mujeres como individuos y como colectiva para que ellas sigan transformando su realidad y defendiendo su cultura y gastronomía. Una forma de hacerlo es mediante el uso de tecnologías adecuadas en la cocina impulsando fogones para cocinas sanas. Por otro lado, seguir apostando a la producción de alimentos sanos y milpas sin agroquímicos, así como resaltar  la importancia del rescate de las semillas locales como estrategia para tener milpas sin agroquímicos, ni transgénicos. Fortalecer este tejido de mujeres es fortalecer el tejido de la tierra, sus semillas, las plantas, su cultura y territorio.

Image credit Gabriela Sanabria

EL Baluarte La Milpa

Una de las principales actividades del Baluarte será la creación en el municipio de Mitontic de un grupo de guardianes de semillas y un banco de semillas para la conservación de variedades locales de maíz, fomentando su consumo y procesamiento. En otros municipios, el objetivo del Presidium será fortalecer una serie de experiencias virtuosas existentes, como la producción de tostadas por la cooperativa Artesanas de Tostadas de Maíz de Chiapas y el grupo Mujeres y Maíz, aumentando la producción, mejorando el proceso de elaboración de tostadas y encontrando nuevos mercados para este producto.

Este Baluarte se estableció en 2019 como parte del proyecto Slow Yucatán y Chiapas financiado por W.K. Fundación Kellogg. Actúa en cinco municipios del bloque central de Chiapas.

Las organizaciones locales Camadds, Clan Sur (formada por Ciserp A.C., Cofemo A.C. e Idesmac A.C.) y Ecosur trabajan aquí desde hace más de una década para impulsar la seguridad alimentaria, salvaguardar las tradiciones agrícolas y gastronómicas, asegurar la transmisión de conocimientos y promover la agroecología.

Slow Food en conjunto con estas organizaciones han creado el Baluarte con el objetivo de incrementar la disponibilidad de maíz cultivado local y agroecológicamente y fortalecer la cadena productiva de la tostada, visibilizando el rol y conocimiento de las mujeres y creando conciencia en la sociedad sobre la importancia de apoyar estos procesos.