Chicle de algodoncillo o hierba de leche

18 Sep 2020

Asclepias es un género americano de plantas herbáceas con diversas especies perennes y flores conocidas como algodoncillo, sus tallos producen látex, una sustancia lechosa que contiene glucósidos cardiacos.

El género está ampliamente distribuido en México y fue descrito formalmente por el naturalista sueco Carlos Linneo en 1753 en Species Plantarum, quien lo nombró así en honor a Asclepio (Escolapio), educado por el centauro Quirón quien murió en manos de Zeus a petición de Hades por revivir a los muertos con sus habilidades en cirugía y plantas medicinales, convirtiéndose en el dios griego de la medicina y la curación.

El género asclepias contiene alcaloides, flavonoides, taninos y glucósidos cardiacos (cardenólidos) y tiene propiedades terapéuticas como purgante, analgésico, dermatológico, contra afecciones respiratorias, cardiotónico y usos mágico-religiosos e incluso posee algunos compuestos tóxicos. Los estudiosos del género refieren que el látex se ha utilizado en la medicina tradicional desde la época prehispánica.

 width=

Algodoncillo

Asclepias notha, la hierba de leche, es una especie nativa de México considerada maleza, conocida por las personas adultas mayores del Centro de México como algodoncillo o borreguito por la disposición de sus flores y con cuyos tallos elaboraban chicle o goma de mascar hasta hace aproximadamente 30 años. Ésta especie crece de forma silvestre en los límites de las parcelas, lomas, caminos terrosos, raudales y a los costados de carreteras en la región del Eje Neovolcánico Transversal, florece de mayo a julio y es fuente de néctar de abejas, mariposas y otros insectos, el látex es un fluido de defensa contra los herbívoros, por ejemplo las orugas.

Los tallos y hojas de las plantas se cortaban y escurrían obteniendo una savia viscosa y blanca que se vertía en recipientes con agua caliente movidos constantemente para espesarla o solidificarla y formar bolas chiclosas, luego se dejaban enfriar y se consumían como goma de mascar de sabor neutro o semiamargo pero agradable al paladar. Los estambres de las vainas tiernas (folículos) de las plantas se pelaban y se comían.

En las plazas grandes o tianguis como el de Acatzingo en el estado de Puebla, los chicles de hierba de leche se vendían de acuerdo a las crónicas orales en tiras coloridas y apiladas hasta el último cuarto del siglo pasado.

[email protected]

Horticultora, foodie o comidista, investigadora cultural gastronómica y cronista de México para Slow Food Internacional.

Blog & news

Contáctenos

Ponerse en contacto

¿Tiene alguna pregunta o comentario para nuestro equipo? ¡No dudes en ponerte en contacto!